Juan Perán es uno de esos emprendedores de los de antes. Un empresario hecho a sí mismo, sin formación y sin recursos, que ha creado de la nada una marca con presencia internacional y única en el mercado: la primera firma de calzado ecológica con sello español.
Juan Perán Ramos nació en un pequeño pueblo mediterráneo, Torrealvilla, el 13 de diciembre de 1947. En el seno de una familia humilde, desde bien pequeño tuvo que compaginar la escuela con su labor como pastor de un rebaño de ovejas. Con apenas 13 años tuvo que irse a vivir a Elche, una ciudad que estaba creciendo a la sombra de la floreciente industria del calzado, que acogía a gente de todas las comunidades y que generaba empleo en una España entonces muy necesitada.
Una vez en la tierra del calzado, Juan Perán comenzó a trabajar como repartidor en las fábricas pero, siempre atento y proactivo, comenzó a formarse durante las noches en el oficio de cortador de piel para el calzado. Tras su paso por varias empresas, fue en 1974 cuando, después de que le despidieran de la importante marca ilicitana ‘Paredes’, decidió ponerse por su cuenta y emprender su pequeño negocio, su propia marca, que en primera instancia se llamó Juan Perán y, más adelante, pasó a llamarse ‘Nueva Creación’.
Varios años después, en 1984, nació Pikolinos. La empresa que hoy es referente a nivel internacional, con presencia en más de 60 países. Supone la consecución del sueño de Juan de crear una marca referente en calidad, comodidad y diseño. Apenas unos años después, concibió su modelo estrella: “la Romana”, que supuso un golpe de efecto y que le abrió a Pikolinos las puertas de los mercados internacionales; el primero de ellos, Francia, seguido de Alemania y, apenas unos años después, la marca ya estaba presente en casi toda Europa y Estados Unido.
Tras años de esfuerzo y dedicación, ha resultado una empresa de calzado exitosa y cuidadosa con detalles como acabados e imagen de producto. Como suele decirse; de tal palo, tal astilla.
Comments